Todos, en algún momento de nuestra vida, hemos caído en el bucle del que hacer: desistir o insistir. Ese momento en que se desea tirar todos los esfuerzos, empezar desde cero o solo dejar de trabajar en un proyecto que no está rindiendo los frutos que esperabas.
Cuando estamos en el proceso de crecimiento emprendedor es común sentir este tipo de estancamiento cuando los momentos difíciles nos han agotado todos los recursos al punto en que se vuelve insostenible en cualquier sentido. Incluso cuando los números en rojo vislumbra una nueva realidad.
Por eso, en esta estrada, quiero compartir contigo unos trucos sencillos que apliqué en ese momento cuando solo quería dejarlo atrás. Así que, no esperes más; toma papel y lápiz para iniciar.
La influencia del entorno hacia la motivación del emprendedor
Lo primero que te quiero decir es que no hay nada peor que estar en un lugar donde realmente no quieres estar. Donde sientes fastidio ir a trabajar o no te sientes emocionado por seguir ejecutando tus tareas diarias. En su mayoría se debe a que hemos desconectado con el lugar, el entorno y se ha perdido esa motivación inicial que te movía.
De hecho, a mí me hicieron una pregunta similar y lo primero que entra por mi mente es el recuerdo del restaurante que monté con mi hermana. Y era tan desgastante emocionalmente que solo de pensar que debía ir a trabajar ahí… me desmotivaba.
Estos sentimientos e incomodidades debes tomarlas como alarmas o síntomas de lo que ya no está en sintonía contigo; ya que es la manera en como tu subconsciente te está diciendo «¡Hey! ¡Alerta! ¡Alerta! Préstale atención. No lo dejes pasar.»
3 pasos para entender tu camino como emprendedor
Los síntomas que incitan estos pensamientos de desmotivación o desgaste con claros; sin embargo, el camino que sigue tras su detección no lo es tanto. Por eso, con estos consejos, podrás ayudarte a entender cuál es tu situación actual con tu emprendimiento y como emprendedor.
Recuerda que las anclas en los momentos de disgustos y dificultades suelen ser el miedo y el temor de perder la seguridad o del tiempo.
Evalúa tu motivación
Evalúa realmente qué te hace sentir si piensas o te imaginas renunciando al proyecto que estás liderando en la actualidad. Si solo con pensar en esto te sientes mejor o te trae paz; entonces créeme que puede ser el factor determinante que te está indicando el camino para empezar desde cero, dejar el proyecto o encontrar un nuevo rumbo.
Ahora bien, si te hace sentir mal o te hace sentir ansiedad es momento de acudir a la calma. Este es un tipo de episodio que suele ocurrirle a todos los emprendedores donde nos quemamos, también conocido como el síndrome de burn out, donde solo necesitamos descansar y recargar energías para salir adelante.
Evalúa tus contratos ante la sociedad
Muchas veces estamos en un lugar porque es lo socialmente correcto y aceptable. Incluso porque nuestra familia nos dice que ese es el lugar ideal para mantenernos o porque, tras hablarlo con amigos, suelen soltar comentarios predispuestos a no renunciar. Algunos como «¡No! ¿Por qué vas a renunciar?» o «Si tardaste mucho en llegar ahí. ¡Muchas personas quisieran estar en tu lugar!»… y pare de contar.
Entonces, estos contratos que das por sentado te hacen estar en un lugar que TÚ no quieres, pero que el resto del mundo a tu alrededor sí lo desea. Por eso, es importante en este punto que evalúes si estás donde quieres estar por convicción propia.
Haz tu plan de acción
Esto lo suelo repetir muchísimo entre mis entradas y vídeos, pero es justamente el siguiente paso tras haber tomado la decisión. A partir de ahora, si ya evaluaste y dices: «Bueno, sí, quiero empezar desde cero» o «¡Vamos a darle con todo al proyecto!», es tiempo de hacer tu propio plan de acción a partir desde este momento en que has tomado la decisión.
De hecho, lo principal es crear un plan que te permita sobrevivir los próximos 6 meses. Si tienes un colchón de dinero suficiente para sobrevivir ese tiempo o no. Esto con base en que debemos tener un respaldo mientras creamos un nuevo negocio, pues cabe la posibilidad de que no rinda los frutos estipulados ni los esperados.
¿Es fácil dejar atrás un proyecto que tanto empeño requirió?
Ahora lo que si es muy importante aquí es que dejar un negocio o dejar un proyecto atrás depende mucho de tu personalidad. Existen personas que pelean hasta el final por sus ideas, mientras otros priorizan su salud mental y emocional soltando el actual para iniciar con algo más acorde.
De hecho, la respuesta no la tengo yo, sino tú. Aquí el verdadero factor determinante es la realidad que estás viviendo en estos momentos, así como tu disposición a dejarlo todo o continuar en el proyecto actual. Por eso, la introspección es clave para dar con las respuestas correctas, siempre pensado en tu realidad y en cómo puede afectar el entorno y por supuesto, cómo quedas tú.
Cuando se está en un lugar donde no queremos… Es difícil seguir. Recuerda que la vida es muy corta para continuar ahí.
¡Ahora sí! Recuerda que puedes visualizar esta entrada en su formato vídeo. Aquí te dejo el link.
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¡Nos vemos la siguiente semana!