¡Pierde ese temor a vender!
Abraza la abundancia financiera y genera esos primeros 1000 USD que tanto quieres facturar. En este video de comento 3 consejos que pueden impulsarte a facturar más y más, sin perder la escalabilidad de tu negocio.
La historia de mis primeros mil dólares
Estaba empezando apenas a dar asesorías a emprendedores; así que, a mí me daba mucho miedo y nervios a hablar con el cliente para darle una cotización. Entonces, cuando el cliente me decía «¿cuánto cuesta?» Yo terminaba justificando el precio porque no me creía realmente lo que estaba haciendo.
En fin, mi historia (caso real) empieza cuando tuve una reunión con un cliente a través de Zoom. Tenía este cliente platicando conmigo, yo le estoy diciendo en qué lo vamos a ayudar y demás, pero me dice:
«Ah, no, está muy bien y todo lo que me estás diciendo, pero ¿Cuánto sale eso, o sea cuánto me va a cobrar realmente? El dinero no es un problema».
Por mi parte, estaba librando una batalla interna donde no sabía qué hacer, mientras otra quería mostrar seguridad de mí mismo. No hallaba qué monto decirle, pero cuando me dijo que no tenía
problema con el dinero, yo tomé valor y le dije: «Bueno, eso te cuestan mil dólares». Solo dijo: «Ah bueno, perfecto. ¿Dónde pago?», le envío el enlace de pago, hizo el pago y listo. Así tuve mis primeros mil dólares.
Sé que esto no le pasa a todo el mundo. Esto fue como un evento
fortuito, pero ahí me di cuenta de que sí podía cobrar mil dólares por mis servicios, que si era el monto que valían mis servicios.
Esto pasa a veces con los emprendedores que no empiezan a generar
abundancia, porque piensan que lo que están haciendo no es necesario que cobren tanto. También es posible que estén en problemas con el dinero, en temas de creencias.
Entonces, mira, tantas cosas pueden pasar por tu mente, pero aquí te lo encapsulo en tres pasos qué puedes empezar a hacer para contrarrestar estos efectos y empezar a facturar.
Analiza si tienes un producto o un servicio
Analiza si lo que estás vendiendo o lo que estás ofreciendo es realmente un producto o un servicio que allá afuera están
necesitando.
También evalúa si hay demanda de este producto, porque no tiene sentido que esté vendiendo algo que la gente no necesita o que, por lo pronto, no les importa y tú estás perdiendo tu tiempo, dinero, esfuerzo y energía en todo lo que estás haciendo para vender.
Entonces, sé muy consciente si esto realmente es una necesidad, ¿vale? Esto lo logras investigando en internet, haciendo un estudio de mercado, pregúntale a la gente e investigando sobre personas que estuvieron en un problema similar donde quieras ayudarle en ese anhelo o problema, etcétera.
Una vez que lo sepas y dices bueno mira si realmente la gente está necesitando este producto o servicio… Puedes pasar al siguiente paso.
Desfragmenta el monto
Fíjate, si nunca ha facturado mil dólares probablemente se te haga como mucho y realmente no es nada, tú digas «Ah, es demasiado y hay gente que no paga por eso».
Por supuesto que sí hay personas que pagaran por eso. La misma energía que implementas en vender algo barato, es exactamente la misma energía que empleas en vender algo caro.
¿Cuál es la diferencia? Tu seguridad. La forma en la que comunicas las ventajas y las toda la oferta de valor que tiene.
Entonces, voy al punto de desfragmentar el monto. Si ves que es mucho, entonces empieza a dividirlo en semanas, días u horas, etcétera. Como tú quieras hacer.
Por ejemplo, si tu meta es facturar diez mil dólares mensuales, eso lo pues se puede convertir en 250 dólares semanales. Entonces, ya no tienes la carga emocional de «Tengo que facturar mil dólares» sino que se convierte en «Tengo que facturar unos 250 dólares» y cuando menos te des cuenta, créeme, que te va a pasar: ya tienes los mil dólares.
Desfragmenta el monto para que lo puedas ver como mucho más
alcanzable. Se trata de engañar a tu cerebro básicamente.
Sube los precios de lo que ofreces
Como te vengo diciendo, es lo mismo venderle a alguien algo caro a venderle a alguien algo barato. Es exactamente lo mismo, pero la diferencia está en tu mentalidad y como reaccionas al momento de vender algo caro.
Antes de subir los precios, date cuenta si lo que estás vendiendo realmente cuesta eso. Si no, entonces vas a vender algo en mil dólares y resulta que lo que estás dando es algo chafa, algo sin calidad. Recuerda que tienes que mantener tu reputación y para ello, debes vender cosas que realmente valgan la recompensa de pagar, por ello.
Para ello, vas a analizar tu producto con toda la honestidad posible. Además, ve trabajando la forma en la que vendes las ofertas, porque muchas veces no es lo que vendes, sino cómo lo vendes y que realmente estás ayudando a alguien.
Plus: Delega las funciones no relacionadas a vender
Métete de lleno en este punto y trabaja con enfoque para que te des cuenta si puedes empezar a subir los precios. Para ello, te daré un plus poderoso que puedes empezar a implementar:
Pierde el miedo a vender.
Muchos emprendedores se enfocan en cosas administrativas (que si es bueno), creando contenido en redes sociales y mil cosas más, con tal de no vender.
Le tienen tanto miedo a vender, que se llenan de tareas que no son tan necesarias para un emprendedor. Tú, como CEO de tu marca, tienes la única función de traer clientes nuevos. Punto.
De verdad, empieza a delegar las cosas que no tienes que estar haciendo tú. Porque qué bonito que lo hagas, pero empieza a delegar que porque se verán reflejados en tus ingresos esta falta de ventas.
En otra oportunidad, cree una entrada especializada en cómo
contratar equipos. Entonces, chécala para que sepas cómo puedes
empezar a contratar personas para tu marca.
Masterclass para Vender Mucho Más
Si todavía estás pensando «Oye, está genial, pero no tengo como una
estructura, o sea, no sé cómo que paso seguir para esto que me estás diciendo y hacerlo realidad»…
Entonces te voy a invitar a una Masterclass, totalmente gratuita, que te va a ayudar a perder el miedo a vender, te va a ayudar mostrarte frente a cámara, a hablar con soltura. Aquí te daré una estructura
para vender mucho más.
Si esto es algo que te interesa,
inscríbete aquí, pero date prisa porque las plazas no están disponibles por mucho tiempo.
Recuerda que puedes visualizar esta entrada en su formato vídeo. Aquí lo dejo para que lo cheques.
No olvides compartir este post si te ha servido de ayuda y si tienes dudas puedes dejármelas en la sección de comentarios para aclarar tus dudas.
¡Nos vemos la siguiente semana!