Al adentrarse en el mundo digital tienes que tener varios puntos claros:
- Existen personas que estarán dispuestos a escuchar lo que dices.
- Habrá un pequeño grupo que estará al asecho de los errores.
- Tendrás a la competencia más cerca de lo que crees.
- Potenciar tu emprendimiento llevará tiempo.
- Llegarán servicios de la nada que te pueden hacer cometer errores.
Esto último me ocurrió recientemente (hace unas semanas) y me gustaría compartirlo contigo a través de esta sección. Te comento mejor la situación:
Todo el tema inició por querer aumentar mis seguidores. Si te soy sincero, no soy de los que dan excesiva importancia al tema de los leads; sin embargo, es importante hacer crecer tu comunidad online para conectar con el mundo.
Básicamente porque mientras más personas te escuchan, mayor impacto generas en ellos y empiezas a crear una retroalimentación estable. Ese proceso lleva tiempo. ¡Todos lo sabemos! Aun así, caí en la estafa de los Seguidores Fantasmas.
Cada trato o compra requiere una muestra de validez
Un día, mientras revisaba Instagram, una persona se comunicó conmigo ofreciéndome un servicio de promoción que consistía en hacerme una campaña para aumentar mis seguidores en esta red social. Hizo énfasis en que se encargaba de segmentar prospectos, pero no era una propuesta muy confiable.
Con el fin de despejar mis dudas comienzo a hacer las preguntas pertinentes para estos casos:
- ¿Son clientes segmentados?
- ¿No es una clase de propaganda a través de post?
- ¿Necesitarás mis datos de acceso?
A todo esto, la persona respondió que no. Me aseguró que era una campaña que funcionaba y que los seguidores estarían segmentados según mi Cliente Ideal (C.I). Además, no era necesario que le cediera mis datos de acceso. ¡Así de seguro era!
Entonces, procedí a efectuar el pago del servicio (80$) a través del banco. Apenas comprobasen el pago arrancaba la campaña. Al final, la supuesta campaña se trataba de post en el feed donde te mencionaban y decía: ‘Síguelo’. Terminé recibiendo solo 3 seguidores de todos los prometidos.
¡Había sido estafado! ¡No podía creerlo!
Así que me comunique con la persona que me contactó para manifestar mi disgusto con el «servicio» y reclamar mi reembolso. Ante esta situación, se negaron a efectuar el retorno del dinero; por lo que tomé acciones mayores y emití un reclamo por el banco.
Las consecuencias fueron trascendentes:
- Generó una nueva desconfianza ante los servicios online.
- Logró que una de mis cuentas fuera restringida para hacer pagos.
- Dejó una enseñanza que continúo reflexionando.
La lección del cuento: menos seguidores es mayor impacto
Ten en cuenta esta situación por la que pasé. Evalúa los perfiles, no ignores las señales y cree en tu sexto sentido a la hora de contratar servicios de este estilo. Por último, me queda solo una cosa más por compartir:
MÁS VALE UN PEQUEÑO NÚMERO DE SEGUIDORES DISPUESTOS A ESCUCHAR TU MARCA QUE MILLONES QUE LA IGNOREN
Tu marca es importante y debe llegar a las personas que le interesen. Ser escuchado y valorado entre tu comunidad de seguidores es lo que te dará la autoridad que tanto requieres; así pues, solo trabaja con constancia.
La interacción llegará tarde o temprano como resultado de tu esfuerzo.
¿Alguna vez has sido víctima de las ofertas de Seguidores Fantasmas? ¡Te leo en los comentarios!
